RÉGIMEN LEGAL DE BOGOTÁ D.C.

© Propiedad de la Secretaría Jurídica Distrital de la Alcaldía Mayor de Bogotá D.C.

Secretaría
Jurídica Distrital

Cargando el Contenido del Documento
Por favor espere...

Proyecto de Acuerdo 132 de 2015 Concejo de Bogotá, D.C.

Fecha de Expedición:
--/ 00/2015
Fecha de Entrada en Vigencia:
Medio de Publicación:
Anales del Concejo
La Secretaría Jurídica Distrital aclara que la información aquí contenida tiene exclusivamente carácter informativo, su vigencia está sujeta al análisis y competencias que determine la Ley o los reglamentos. Los contenidos están en permanente actualización.


 
 

PROYECTO DE ACUERDO No. 132 DE 2015

 

POR EL CUAL  SE ADOPTA LA ESTRATEGIA  “USAR LA CANASTA” PARA LA REDUCCION DEL USO DE BOLSAS PLASTICAS LIVIANAS EN EL DISTRITO CAPITAL Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES

 

1. OBJETO

 

El objeto de presente proyecto de acuerdo es definir los criterios de aplicación de una estrategia para reducir el uso de bolsas plásticas livianas en el distrito capital y señalar compromisos específicos para el gobierno, los comerciantes y los consumidores de la ciudad con el fin de mitigar el impacto ambiental dañino producido por el uso de estos medios y la promoción de medios alternativos de envases para llevar productos al hogar o trasladarlos.

 

2. JUSTIFICACIÓN

 

Según Fenalco1, de las más de 6 mil toneladas de basura que llegan al Relleno Sanitario Doña Juana al día, el 14 por ciento (840 toneladas) son materiales plásticos, en su mayoría bolsas. Las grandes superficies bogotanas, de acuerdo a la investigación, consumen al mes un aproximado de 45.229.240 bolsas plásticas. A nivel mundial, al año aproximadamente se consumen entre 500 millones y 1 billón de bolsas de plástico; es decir que cada minuto se utilizan 1 millón de estos empaques.

 

La bolsa de plástico es un objeto utilizado para transportar pequeñas cantidades de mercancías, es un producto utilizado por la población en grandes cantidades ya que, sin advertirlo, la sociedad se ha hecho dependiente de ellas, debido a su fácil acceso, distribución gratuita en los supermercados, plazas de mercado y  tiendas de barrio2.

 

De acuerdo con los estudios3, la fabricación de una bolsa de plástico es la conclusión de un largo proceso de modificación de materia, en la cual el insumo básico es el petróleo. Todos los tipos de bolsas plásticas, ya sea para uso doméstico o industrial se fabrican a partir del petróleo. Este petróleo es refinado en industrias especializadas en purificación de petróleo, donde es convertido a un gas llamado etileno. El gas obtenido se polimeriza y solidifica hasta crear el polietileno o polímero de etileno, el cual es cortado en pequeños granos e introducidos en sacos de 25 a 500 Kg, para posteriormente emplearlo como materia prima para la fabricación de bolsas plásticas.

 

Se estima que el 4% del total del petróleo extraído se destina a la industria del plástico4; como efecto, en los países en que se pide el uso de este material, se encontró que en España, entre los años 2000 y 2002, se consumió 1.502.519 toneladas de plástico que, posterior a su uso se convirtió en residuo, reciclándose tan sólo el 17,1% del total.

 

De acuerdo con el concepto de ongs ambientalistas, las bolsas plásticas son un problema ambiental debido principalmente a:

 

1. El hecho de que son fabricadas a partir del petróleo, el cual es un recurso natural no renovable con probabilidades de agotarse en los próximos 50 años.

 

2. Las cantidades tan grandes que consumimos y desechamos: el consumo mundial de bolsas por minuto es de 1.000.000.

 

3. La falta de una política de sustitución o su eliminación, tiene las siguientes consecuencias:

 

*Contaminación de afluentes y depósitos naturales de aguas.

 

*Incremento de las posibilidades de riesgos a padecer enfermedades cancerígenas (debido a compuestos químicos tóxicos que contienen algunos plásticos).

 

*Emisiones de gases tóxicos y venenosos al incinerarlas.

 

*Taponamiento de alcantarillados que aumenta el riesgo de inundación.

 

Muertes de miles de animales como aves, tortugas, leones marinos y muchos peces que las ingieren porque las confunden con alimento (Greenpeace estima que más de 18.000 piezas de bolsas plásticas flotan en cada kilómetro de nuestros océanos).

 

4. El tiempo que tarda una bolsa plástica en ser descompuesta. Se calcula que la basura de bolsas plásticas al llegar a los botaderos y ser tratada técnicamente (como en el botadero de Doña Juana), se tarda aproximadamente entre 100 a 400 años en descomponerse y en algunos casos nunca habrá descomposición. Entre tanto, la basura que se descompone (residuos orgánicos) tarda aproximadamente entre 10 y 15 años en este proceso.

 

La práctica comercial nos ha acostumbrado a que sea agradable ir al supermercado hacer la compra y salir con todos los artículos dentro de bolsas de plástico.  Además, los usos prácticos de la bolsa, para envasar5 alimentos, ropa, o cualquier compra cotidiana y su bajo coste para el comerciante hacen de la herramienta un medio que “facilita” el comercio y la vida cotidiana6.  Sin embargo, cada bolsa de plástico que se utiliza en las compras diarias tiene un importante coste medioambiental. En su fabricación se usa energía, se gastan productos no renovables del planeta y se contamina el medioambiente. En tierra y en el mar las bolsas de plástico ya constituyen casi un elemento de los paisajes, lo cual significa un impacto ambiental que se debe mitigar.

 

Hoy, podemos decir con acierto que los ciudadanos en su gran mayoría han creado una dependencia de la bolsa de plástico, con efectos graves para el ambiente como es la acumulación en rellenos sanitarios, basureros, la contaminación visual y hasta la falta de educación ambiental que termina muchas veces en problemas más graves como el taponamiento de alcantarillas y otros7.

 

Este proyecto es una propuesta de sustitución, más no de prohibición del uso de elementos que genera la industria colombiana; si bien, este sector representa un gremio de la producción, genera empleo y paga impuestos, también lo es que debe ser vinculado en relación con los efectos del problema y las posibles soluciones que son una línea abierta para la administración distrital y los interesados en el tema.

 

En efecto, la producción de artículos plásticos en Colombia tiene un valor de USD 4.000 millones al año8, según el presidente de la Asociación Colombiana de Industrias Plásticas, Acoplásticos, Carlos Alberto Garay Salamanca, mientras en 2011 el crecimiento fue del 7.8%, en el año 2012 el sector creció en 5%, esta cifra es una tendencia ascendente.

 

Este gremio agrupa a 600 empresas de los sectores del plástico, químicos, petroquímicos, pinturas, tintas, caucho y fibras, y según un reporte del Dane, el sector genera más de 40.000 empleos directos.

 

Pese a los beneficios económico-comerciales del sector, lo cierto es que los plásticos son contaminantes de difícil degradación que son ya un problema que ha fijado la atención mundial de los gobiernos.  Las acciones de  mitigación se centran en definir la destinación final, los procesos de recuperación y el impacto para aquellos desechos no controlados.

 

Pese a no ser considerados residuos peligrosos, los desechos plásticos tienen efectos ambientales significativos que suelen pasar inadvertidos, pero que constituyen una problemática grave.

 

En el caso de  Bogotá, no todos los residuos plásticos llegan al relleno distrital. Por eso, estos tienen diferentes impactos según su disposición final o sus procesos de recuperación. Una buena cantidad navega por fuentes hídricas, sin poder ser controlados, o quedan en las vías públicas y afectan la estética de la ciudad.

Alejandra Téllez Maldonado, en su trabajo de tesis en la Maestría en Ambiente y Desarrollo, elaboró un detallado análisis sobre la crítica situación debida a la contaminación por esta clase de productos, esenciales para la vida moderna. Asimismo, efectuó una revisión de las políticas públicas sobre el tema y evidenció que quedan grandes retos para adquirir una consciencia más ecológica al respecto.

 

En materia normativa, el distrito cuanta con algún material  formal que no establecer criterios claros para  hacer coercible la reducción, siendo este un paso necesario y urgente en el propósito de mitigar el impacto ambiental de este elemento.  Según la Investigación de Téllez,  “la norma más reciente relacionada con el uso de estos desechos es la  Resolución 829 del 17 de febrero de 2011. En esta se establece el programa de “Racionalización, reutilización y reciclaje de bolsas en el Distrito Capital”. Esta consiste en la reducción paulatina del uso de bolsas plásticas en grandes superficies, centros comerciales y el sector comercial en general. Letra muerta en el distrito capital pues no existe liderazgo administrativo para lograr que el sector privado disminuya el uso de este material.

 

Las opciones para actuar, considerando los usos y generadores de desechos y en particular el uso masivo de bolsas plásticas livianas, podrían ser:  la reducción de los residuos,  la reutilización y el reciclaje.  En el caso de las bolsas plásticas livianas, su densidad y duración es baja, para hacer una bolsa reutilizable se requiere que sea de tela, o de mayor densidad del plástico, la reutilización en muchos casos consiste en destinar las bolsas a usos residuales domésticos, mientras que el reciclaje de este desecho es casi nulo.

 

 De acuerdo con el estudio de Tellez, “Es fundamental apostarle a una reducción en la fuente, desde el diseño del producto, que responda a criterios ambientales. El ecodiseño debe constituirse como un elemento integral de todo proceso de desarrollo de productos y no considerarlo simplemente un plus. Así como se esmeran en identificar al consumidor y sus deseos, los productores deberían empezar a vincular criterios de ciclo de vida. Es decir, no solo pensar en el proceso de fabricación y de venta al consumidor, sino también en qué pasa después y diseñar el proceso de desecho”, lo que significa que los comerciantes tienen gran responsabilidad en el uso de este elemento contaminante y deben ser promotores de medios que los sustituyan en un término razonable de pocos años.

 

Si bien, en algunos países han optado por  la prohibición,  en organizaciones como la Unión Europea, se ha diseñado una directiva que vincula a los Estados con el deber de formular un plan de acción para reducir y eliminar el uso de la bolsa Plástica liviana9.

 

Una medida alternativa, que deja el sinsabor de que el que tiene dinero puede contaminar es la que señala obligar a pagar un impuesto, como medio para lograr desestimular el uso de bolsas plásticas: cobran por estas o las prohíben.

 

De acuerdo con los ejemplos citados por Tellez, en Irlanda, por ejemplo, desde el 2002, se cobra el “PlasTax”, un impuesto de 15 céntimos de euro por bolsa, a excepción de las bolsas para empacar productos sin empaque y las bolsas reutilizables. El propósito era cambiar el comportamiento del consumidor mediante una solución de mercado. En efecto, esto logró la caída del 90% de consumo de estas bolsas, mientras que lo recaudado se usó en programas de reciclaje.

 

Algo similar ocurre en Escocia, Reino Unido, Israel y Bangladesh, donde las personas pueden ser multadas por el uso de bolsas plásticas, en valores que pueden alcanzar los nueve dólares. ¿La razón?, las bolsas colapsaban los alcantarillados, provocando inundaciones.

 

 En este mismo sentido,  desde el año 2007, la ciudad de San Francisco se convirtió en la primera ciudad de los Estados Unidos en prohibir las bolsas plásticas y exigir que sean reemplazadas por bolsas reutilizables y reciclables;  en Australia, el 90% de los comerciantes firmaron un acuerdo voluntario para reducir el expendio y uso de bolsas plásticas. Actualmente la Comisión Europea está estudiando un sistema para eliminar las bolsas plásticas en el año 2014, mientras España estudia una legislación para sustituirlas en el 2018.  Muestra de ese interés es que en Zaragoza bajo el lema  “La bolsa o la vida”, se inició un plan para concienciar a los ciudadanos de la necesidad de reducir el consumo de bolsas de plástico que utilizan en su vida diaria. Actualmente, algunos supermercados ofrecen bolsas de tela.

 

Se ha recomendado por distintas investigaciones, incluyendo la citada de Téllez Maldonado, que la ciudad debe explorar alternativas de ese tipo se podrían aplicar para reducir el uso de Bolsas, por ejemplo con el uso de las canastas de fibra natural o las bolsas de papel, las canastas metálicas de ruedas, o las bolsas de fibra. “Es deber de las entidades públicas incentivar campañas pedagógicas efectivas para cambiar los comportamientos de consumo. En la ciudad de Bogotá estamos en mora de asimilar esta conducta amigable con el ambiente y elevar en la agenda pública la importancia de este problema que puede llevar a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

 

La canasta familiar y la bolsa de los mandados.

 

Nuestras abuelas y madres para hacer mercado antes, preferían llevar un canasto, de allí que aún se usa el termino canasta familiar, para metaforizar el costo de vida, también solía usarse una bolsa de tela o fique, para ir a la tienda; estas costumbres han desaparecido, ocasionando la dependencia que señalamos al inicio de la bolsa de plástico. El uso indiscriminado de bolsas plásticas, que tardan años en degradarse hoy son un problema para la supervivencia humana.

 

“Se calcula que fabricar una bolsa plástica toma un segundo, que el tiempo de utilización son 20 minutos y el tiempo de descomposición supera los 400 años”.

Mientras el costo de fabricación es mínimo, el daño ambiental que produce la acumulación de este producto en fuentes hídricas y cuerpos de agua es incalculable. La muerte de animales como tortugas, peces, y aves, que las confunden con alimento se cuenta por miles.  Greenpeace calcula que hay más de 18000 piezas de bolsas plásticas que flotan en cada kilómetro de los océanos del mundo.

 

La propuesta de este proyecto de acuerdo es promover la moda del uso del canato, en esto pueden apoyar a la ciudad las cadenas de supermercados, los tenderos y las plazas de mercado, liderados por la administración distrital, estableciendo unos cronogramas claros de reducción de la presencia de este desecho en los sitios de disposición final.   Hoy, muchas empresas promueven alternativas para la reducción del uso de bolsas.

 

Sin embargo, estas alternativas no han logrado reducir el uso de este material, derivado del petróleo y altamente contaminante. El uso de bolsas biodegradables no ha sido la mejor propuesta, en cambio las bolsas reutilizables de gran tamaño y/o las bolsas de tela o papel, sirven al propósito de mitigar el daño al ambiente que causamos cuando buscamos abastecernos de alimentos, principalmente.

 

FUNDAMENTO LEGAL

 

El Art. 79 de la Constitución Política, establece el derecho a gozar de un ambiente sano y el deber del Estado y de los particulares de protegerlo, de igual manera establece deberes para el consumidor en el sentido de señalar la corresponsabilidad en la preservación del ambiente y el derecho al goce de los recursos naturales.

 

Por su parte, la Ley 1480 de 2011, Estatuto del Consumidor, señala la responsabilidad empresarial y del consumidor en la adopción de medidas de protección del ambiente y los efectos derivados del comercio de bienes y servicios.

 

Ahora bien, el Decreto Ley 1421 de 1993 - 7,  establece como competencia del concejo de Bogotá, la facultad de “Dictar las normas necesarias para garantizar la preservación y defensa del patrimonio ecológico, los recursos naturales y el medio ambiente”.

 

Por su parte, la doctrina y pronunciamientos de organismos internacionales de derechos humanos y de los pactos internacionales en donde la nación colombiana es signataria, se integran al bloque de constitucionalidad por mandato expreso de la interpretación y fuentes del derecho señalado por la Corte Constitucional, siendo estos pronunciamientos directivas  dadas a la comunidad de naciones y a los gobiernos locales, así por ejemplo: El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) ha realizado llamamientos “para que se deje de fabricar bolsas de plástico, que tanto dañan a mares y océanos”. En consideración de ese ente, “no hay justificación para continuar produciéndolas y pidió su prohibición. En informe presentado en el año 2009, este ente de Naciones Unidad, presentó un informe que muestra el daño que producen las bolsas de polietileno, así como las colillas de cigarrillos y los instrumentos de pesca arrojados al mar.

 

IMPACTO FISCAL

 

El presente proyecto de acuerdo, es una regla que crea una estrategia cuya implementación y costos dependen del alcance que a ella den las autoridades administrativas encargadas de administrarlas. Por lo tanto, los costos eventuales de liderar los proyectos, no implican asignaciones presupuestales significativas, y menos, cuando el distrito cuenta con decretos distritales en operación, que carecen de criterios como se fijan en esta propuesta tales como cronogramas, monitoreos, líneas de base y fecha para las metas que se fijen.

 

Así las cosas, en nuestro criterio, la norma señala de manera imperativa las acciones que debe emprender la administración distrital y la regulación a los particulares sobre la materia pero no establece asignaciones presupuestales específicas que impacten el presupuesto de la ciudad. Adicionalmente, de acusarse este impacto, el eje dos del plan Distrital de Desarrollo, señal que la ciudad prioriza el ordenamiento alrededor del agua, la protección de los cuerpos de agua y la mitigación del impacto ambiental producido por la actividad humana en la ciudad.

 

En conclusión el proyecto se adapta a las líneas de acción del plan de desarrollo y no causa mayores gastas a la administración Distrital.

 

AUTORES:

 

MARÍA CLARA NAME RAMÍREZ

 

EDWARD ANIBAL ARIAS RUBIO

 

Concejal de Bogotá

 

Vocero de la Bancadz

 

BORYS DE JESÚS MONTESDEOCA

 

CARLOS VICENTE DE ROUX R

 

Concejal De Bogotá

 

Concejal De Bogotá

 

YEZID RAFAEL GARCÍA ABELLO

 

 

DIEGO RAMIRO GARCÍA BEJARANO

 

Concejal De Bogotá

 

Concejal De Bogotá

 

CARLOS ROBERTO SAENZ VARGAS

 

HOSMAN YAITH MARTÍNEZ MORENO

 

Concejal De Bogotá

 

Concejal De Bogotá

 

MARÍA FERNANDA ROJAS MANTILLA

 

WILLIAM CÉSAR MORENO ROMERO

 

Concejal De Bogotá

 

Concejal De Bogotá

 

DIANA ALEJANDRA RODRÍGUEZ C

 

LUCIA BASTIDAS UBATE

 

Concejal De Bogotá

 

Concejal De Bogotá

 

ANTONIO E SANGUINO PAEZ

 

Concejal de Bogotá

 

 

PROYECTO DE ACUERDO

 

POR EL CUAL  SE ADOPTA LA ESTRATEGIA  “USAR LA CANASTA” PARA LA REDUCCION DEL USO DE BOLSAS PLASTICAS LIVIANAS EN EL DISTRITO CAPITAL Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES

 

EL CONCEJO DE BOGOTÁ EN USO DE SUS FACULTADES CONSTITUCIONALES Y LEGALES, ESPECIALMENTE LAS ESTABLECIDAS EN EL Art. 12 – 7 DEL DECRETO LEY 1421 DE 1993

 

ACUERDA:

 

Artículo Primero: Adoptar la estrategia “usar la Canasta” para reducción del uso de bolsas plásticas livianas en el Distrito Capital, con el fin de logar su sustitución progresiva y promover el uso de la canasta, la bolsa de mandados o envases reutilizables para las compras  y mitigar el impacto ambiental de la bolsa liviana.

 

Artículo Segundo: En la Ciudad de Bogotá D.C, se implementará un plan de acción para reducir el uso de bolsas plásticas livianas liderado por el Alcalde Mayor de Bogotá, la Secretaria Distrital de Ambiente y el Instituto para la Economía Social, vinculado a las empresas privadas, grandes superficies, plazas de mercado y al gremio de tenderos que utilizan estos elementos para ejercer sus actividades comerciales o de suministro de bienes.

 

Parágrafo: Corresponderá al Instituto para la Economía Social liderar en las plazas de mercado de la ciudad la sustitución de bolsas plásticas livianas observando los criterios que se establecen en este Acuerdo.

 

Artículo Tercero: La administración tendrá como criterios del  plan de acción los siguientes: establecerá una línea de base, fijará un cronograma de actividades, formulará un cronograma de monitoreo, fijará una meta final en tiempo y en nivel de sustitución de estos envases, establecerá un componente de educación y cultura ciudadana.

 

Artículo Cuarto: Los Establecimientos de comercio asentados en Bogotá D.C, que no sean liderados por el gobierno distrital tendrán un plan de acción para sustituir las bolsas plásticas livianas y deberán ofertar productos que las sustituyan y promoverán la reducción del uso de bolsas por elementos reutilizables.

 

Artículo Quinto: La Secretaria Distrital de Cultura, Recreación y Deporte, dispondrá de los medios necesarios para promover el uso de envases reutilizables que sustituyan las bolsas plásticas livianas.

 

Artículo Sexto: Con el fin de Generar cultura ciudadana para la reducción del uso de bolsas plásticas livianas, los establecimientos de comercio podrán instalar publicidad exterior visual exenta de impuestos, siempre que promuevan el uso de envases reutilizables.

 

Parágrafo: la Secretaria Distrital de Ambiente certificará el contenido de la publicidad exterior visual con el fin de no cobrar impuestos a la publicidad exterior visual, esta certificar se hará antes de la instalación del anuncio.

 

Artículo Séptimo: El presente Acuerdo rige a partir de su publicación y deroga todas las nomas que le sean contrarias.

 

GUSTAVO PETRO URREGO

 

NELLY PATRICIA MOSQUERA MURCIA

 

Alcalde Mayor  de Bogotá D.C

Presidenta Concejo de Bogotá

 

NOTAS DE PIE DE PÁGINA.

 

1 Estudio Realizado en el año 2013.

 

2 Autor: Agencia de Noticias Universidad Nacional de Colombia

 

3 http://www.terra.org/categorias/articulos/evitar-las-bolsas-de-plastico-de-la-compra

 

4 http://www.terra.org/categorias/articulos/evitar-las-bolsas-de-plastico-de-la-compra

 

5 Utilizamos la palabra envase en el sentido que le da el Diccionario de la Real Academia de la Lengua.  Envase: Aquello que envuelve o contiene artículos de comercio u otros efectos para conservarlos o transportarlos.

 

6 Ibíd.

 

7 Ibíd.

 

8 Según Cifras de 2012.

 

9 DIRECTIVA DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO. Por la que se modifica la Directiva 94/62/CE, relativa a los envases y residuos de envases,para reducir el consumo de bolsas de plástico