RÉGIMEN LEGAL DE BOGOTÁ D.C.

© Propiedad de la Secretaría Jurídica Distrital de la Alcaldía Mayor de Bogotá D.C.

Secretaría
Jurídica Distrital

Cargando el Contenido del Documento
Por favor espere...

Proyecto de Acuerdo 20 de 2000 Concejo de Bogotá, D.C.

Fecha de Expedición:
01/01/2000
Fecha de Entrada en Vigencia:
01/01/2000
Medio de Publicación:
No fue publicado
La Secretaría Jurídica Distrital aclara que la información aquí contenida tiene exclusivamente carácter informativo, su vigencia está sujeta al análisis y competencias que determine la Ley o los reglamentos. Los contenidos están en permanente actualización.


 
 

PAC00202000

PROYECTO DE ACUERDO 020 DE 2000

"POR EL CUAL SE RINDE HOMENAJE A LA MEMORIA DEL CAUDILLO DEL PUEBLO JORGE ELIECER GAITAN, Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES"

CARLOS MORENO DE CARO

CONCEJAL DE BOGOTA

BOGOTA, ENERO DE 2001

Bogotá, D.C., Enero de 2001

Doctor

LUIS FERNANDO CUBILLOS NEIRA

Secretario General

CONCEJO DE BOGOTA

Ciudad

De la manera más atenta me permito remitirle para su inmediato trámite, el Proyecto de Acuerdo de mi autoría, "POR EL CUAL SE RINDE HOMENAJE A LA MEMORIA DEL CAUDILLO DEL PUEBLO JORGE ELIECER GAITAN, Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES"

Cordialmente,

CARLOS MORENO DE CARO

Concejal de Bogotá

PROYECTO DE ACUERDO DE 2000

"POR EL CUAL SE RINDE HOMENAJE A LA MEMORIA DEL CAUDILLO DEL PUEBLO JORGE ELIECER GAITAN, Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES"

EXPOSICION DE MOTIVOS

El 9 de abril de 2001 se cumplirán 53 años del vil asesinato de uno de los más grandes y preclaros hombres de esta nación. De un hombre que a través de actos y de su poderosa palabra, siempre luchó por la unidad nacional, y por la consolidación de una sociedad donde primara la justicia y la igualdad, en fin de un hombre que nunca ahorró esfuerzos porque nuestro país fuera cada vez mejor.

Jorge Eliécer Gaitán, al momento de su muerte, encarnaba las esperanzas de los más humildes, de los desarraigados, de los pequeños campesinos, obreros, y de los desempleados, sin que ello lo condujera a actitudes soberbias y prepotentes. Antes por el contrario, consciente de la fuerza de sus convicciones y argumentaciones sociológicas, filosóficas y políticas, las predicaba con serenidad y altruísmo desmesurado.

Célebre es su famosa Oración por la Paz, pronunciada en un momento álgido de nuestra historia. Dirigiéndose al entonces Presidente Mariano Ospina Pérez le decía:

"Bajo el peso de una onda emoción me dirijo a vuestra Excelencia, interpretando el querer y la voluntad de esta inmensa multitud que esconde su ardiente corazón, lacerado por tanta injusticia, bajo un silencio clamoroso, para pedir que haya paz y piedad para la Patria.

En todo el día de hoy, excelentísimo Señor, la capital de Colombia ha presenciado un espectáculo que no tiene precedentes en su historia. Gentes que vinieron de todo el país, de todas las latitudes ¿ de los llanos ardientes y de las frías altiplanicies ¿ han llegado a congregarse en esta plaza, cuna de nuestras libertades para expresar la irrevocable decisión de defender sus derechos.

Dos horas hace que la inmensa multitud desemboca en esta plaza y no se ha escuchado, sin embargo, un solo grito, porque en el fondo de los corazones sólo se escucha el golpe de la emoción. Durante las grandes tempestades la fuerza subterránea es mucho más poderosa, y esta tiene el poder de imponer la paz cuando quienes están obligados a imponerla no la imponen.

Señor Presidente: serenamente, tranquilamente, con la emoción que atraviesa el espíritu de los ciudadanos que llenan esta plaza, os pedimos que ejerzáis vuestro mandato, el mismo que os ha dado el pueblo para devolver al país la tranquilidad pública. ¡Todo depende ahora de vos!

Quienes anegan en sangre el territorio de la patria, cesarían en su ciega perfidia. Esos espíritus de mala intención callarían al simple imperio de vuestra voluntad".

Esas palabras, lanzadas en medio de grandes dificultades políticas y sociales, tienen plena vigencia en los actuales momentos. Nuestra nación se desangra, el Estado se descuaderna, la sociedad se descompone.

Decía Gaitán en su momento:

"Impedid, Señor, la violencia. Queremos la defensa de la vida humana, que es lo menos que puede pedir un pueblo. En vez de esta fuerza ciega desatada, debemos aprovechar la capacidad de trabajo del pueblo para beneficio del progreso de Colombia".

Cuánta diferencia con los acólitos de la violencia actual!

Gaitán en la fecha de su muerte había desarrollado una meteórica carrera:

"Nacido en un hogar formado por una meritoria maestra de escuela y un culto librero, son sin duda éstos, el mejor incentivo para la culminación de su vida intelectual y política que lo llevaron a la cúspide de la idolatría popular, y hacer acreedor de la conducción máxima de un Partido centenario como el Partido Liberal Colombiano, impregnado de múltiples y anhelantes reivindicaciones sociales de un amplio sector de la nacionalidad colombiana.

Bachiller a los 21 años, abogado de la Universidad Nacional de Colombia a los 26, doctor en Jurisprudencia de la Real Universidad de Roma a los 29, Representante a la Cámara a los 30, Rector de la Universidad Libre de Colombia a los 31, a los 33 funda y organiza el movimiento político UNIR; ese mismo año el Congreso de la República lo elige Segundo Designado a la Presidencia de la República, a los 38 es nombrado Alcalde de Bogotá, a los 40 es elegido miembro de la Academia Colombia de Jurisprudencia, a los 41 ocupa el cargo de Magistrado de la Corte Suprema de Justicia, a los 42 se desempeña como Ministro de Educación; a los 45, Ministro de Trabajo, a los 47 la Junta de Parlamentarios Liberales lo proclama jefe del Partido Liberal, y el 9 de abril de 1948, a la 1:05 de la tarde, en el disfrute del pleno auge político y con una fuerte opinión liberal y popular, es víctima de un atentado que le produjo la muerte."1

Fue Gaitán un académico defensor de su raza. Según el manizalita Alejandro Vallejo, "a Jorge Eliécer Gaitán en cualquier sitio del planeta le afloraba su profundo nacionalismo y otro tanto de lo indoamericano: así nos lo recuerda aquel día de 1926 cuando Gaitán llega a París de paso para Roma a realizar sus fructíferos estudios de derecho penal bajo las proyecciones y directrices del mundialmente famoso profesor de esa disciplina, el italiano Enrique Ferri. Dice Vallejo: "Confundido con ganaderos argentinos, revolucionarios venezolanos, cónsules peruanos, estudiantes chilenos y médicos colombianos, llegó metido en un tren a la estación de San Lázaro una mañana Jorge Eliécer Gaitán vestido con el peor gusto que pueda tener un americano recién llegado a París".

Y continúa Vallejo: "A pesar de esto, es el centro de atención de la gente que frecuenta el café de la Rotande, de la Cromeríe del Oso Blanco. Allí están entre el conglomerado humano el escultor Pompón, también ha arribado Josefina Baker a tomarse un cóctel; tampoco faltó en esa reunión Picasso a deleitarse con un café crema, quien se acercó a saludar a Gaitán".

Son muchas y divertidas las anécdotas surgidas alrededor de la estancia de Gaitán en Europa. Dice Vallejo : "La que más recuerdo con ocasión de una comida que se realizó en la casa de la poetiza Daré Francis, a la cual fue invitado Gaitán, en ella él fue el centro de cuchicheos y comentarios de damas nórdicas que asediaban a la pintora sobre la nacionalidad de ese extraño e importante personaje; en algún momento la pintora les explicó que éste personaje era de la Colombie y las nórdicas sorprendidas exclamaron: ¿pero dónde, por Dios queda eso? Entonces Gaitán se pone de pie, toma la palabra y les explica a ellas lleno de soberbia americana :

"Nosotros somos salvajes, señoras mías. Pertenecemos a una raza feroz. En nuestro país, en el centro de la América Meridional, vamos desnudos. Idolatramos a la luna bajo el nombre de la diosa Chía. Nosotros hemos sido mandados por nuestro pueblo a estudiar vuestra civilización y por eso nos hemos visto obligados a vestirnos con vuestros incómodos trajes, a hablar vuestras lenguas melifluas y afectadas y a observar vuestras complicadas costumbres. Pero no nos satisface nada de lo vuestro. Os encontramos divertidos pero falsos y artificiales, lujuriosos, mezquinos y teatrales. Preferimos mil veces nuestra vida sencilla, pura, simple, casta, fresca de nuestra América.

Así era Gaitán. Honesto, Sencillo y directo. Gaitán, según el Expresidente López Michelsen, no fue el demagogo barato que la tradición ha recogido durante tantos años, sino una persona con un don especial para conmover las muchedumbres y subyugarlas con la palabra.

La vida de Gaitán es descrita magistralmente por Horacio Gómez Aristizábal. "La lucha de Gaitán fue amarga y dura. Con altanería desafió a las oligarquías económicas, sociales y políticas"2

"Los viajes, los reveses, la experiencia, nunca lo corrigieron. Se erguía más colérico a exigir reformas sociales y económicas para los desposeídos, para los ultrajados, para los que padecen sed y hambre de justicia, para los que no tienen como el justo, más que una piedra para reclinar la cabeza"3

En fin, Gaitán criticó a la justicia colombiana por ser excesivamente costosa. "El reconocimiento de nuestro derecho está condicionado a la capacidad económica para comprar papel sellado, pagar abogados costosos ¿ el noventa por ciento de los presos carecen de defensor por falta de recursos materiales y por la inexistencia de apoderados remunerados por el Estado -, comprar estampillas, cancelar timbres, etc. La justicia que exige para su reconocimiento solvencia económica, es una justicia de privilegiados, una justicia clasista". Como penalista, pensaba el líder que el derecho social de castigar, no es ilimitado y no podía ir más allá de lo justo y de lo útil.

Indiscutiblemente lo que más caracterizó a Gaitán fue su elocuencia estremecida, su gesto áspero y tajante, su "YO ACUSO..." a la plutocracia por dura e insensible. Su figura angulosa y compacta hacía pensar en la firmeza de la piedra o de la roca. Bajo la piel morena se adivinada la férrea contextura del cráneo del pómulo y del mentón, como lo narra Horacio Gómez Aristizábal :

"A Gaitán lo dominó toda la vida la obsesión casi irrazonada de realizar una gran idea. El socialismo, más que un mascarón de proa, una pantalla o un vestuario, es una concepción integral del mundo. El socialismo es todo un sistema económico, político y filosófico. Las arengas del líder, como se vió en esta obra, están henchidas de la más agresiva palabrería revolucionaria.

Predicó y practicó en la tribuna una política de puño cerrado y de puño de hierro. ¿Se excedió?... ¿Cometió errores?... Seguramente, la perfección sólo es privativa de Dios.

Para Gaitán las clases oligarcas pertenecían a una misma capilla económica. Si discrepaban aparentemente en lo político, se entendían y se unían a través de mil vínculos en el campo financiero. La plutocracia considera al Estado como fuente de poder y arsenal de privilegios y honores. Es más fácil amasar rápidas fortunas negociando cupos en los campos internacionales, que montando empresas o cultivando la tierra en varias generaciones.

La elocuencia social de Gaitán nos enseño una vez más, que la política enciende las pasiones con más violencia que la pólvora. La dialéctica del rencor sólo caba fosos de sangre. Según Gaitán, donde hay "victimas, habrá victimarios, pues los verdugos pueden ser víctimas que necesitan hacerse justicia con sus propias manos".

De Gaitán perdurará su mensaje social. Terminó las frases de "clisé" y expulsó del vocabulario político, palabras como mármol, sándalo, cigüeñas, jardines, perfumes y puso en circulación vocablos más fuertes y de mayor impacto popular como: lucha, reivindicación, desnutrición, analfabetismo. Complacía hábilmente a "su pueblo" con palabras como "¡mamola!". Exigirle frugalidad al pobre y al miserable, - enseñó el líder ¿ constituye una ironía irritante. Es como pedirle que no coma más al que se está muriendo de hambre".

Por todo lo anteriormente descrito, el ilustre caudillo desaparecido, merece que el Concejo de Bogotá le rinda un merecido homenaje.

Esta propuesta, tiene su fundamento legal en lo dispuesto en la Constitución Política y en el Estatuto Orgánico de Bogotá. El Artículo 8 del Decreto 1421 establece que "El Concejo es la Suprema Autoridad del Distrito Capital". En materia administrativa sus atribuciones son de carácter normativo. Así mismo, el numeral 13 del artículo 12, determina que el Concejo tiene como atribución "Regular la preservación y defensa del Patrimonio Cultural".

EL PRESENTE PROYECTO DE ACUERDO NO GENERA GASTO. El cuadro del líder inmolado se encuentra en una de las oficinas de las comisiones permanentes del Concejo, y simplemente sería reubicado. La placa alegórica será costeada en su totalidad por el suscrito Concejal de Bogotá.

CARLOS MORENO DE CARO

Concejal de Bogotá

NOTAS DE PIE PÁGINA

1 Lizarazo Rondón, Antonio José. "Jorge Eliécer Gaitán Ayala, nuestro Hermano".

2 Gómez Aristizábal Horacio. "Jorge Eliécer Gaitán y la violencia social y política". Pág. 213

3 Ibíd. Pág. 214

PROYECTO DE ACUERDO DE 2000

"POR EL CUAL SE RINDE HOMENAJE A LA MEMORIA DEL CAUDILLO DEL PUEBLO JORGE ELIECER GAITAN, Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES"

EL CONCEJO DE BOGOTA, D.C.,

En uso de sus atribuciones Constitucionales y Legales, y en especial las conferidas por el Decreto Ley 1421 de 1993

ACUERDA

ARTICULO 1°.- Ríndase Homenaje a la memoria del Caudillo del Pueblo Jorge Eliécer Gaitán, designando con su nombre la plazoleta interna del Concejo de Bogotá.

ARTICULO 2°.- Un cuadro con la imagen del ilustre dirigente, será colocado en el recinto los Comuneros del Concejo Capitalino.

ARTICULO 3°.- En la plazoleta interna del Concejo de Bogota se colocará una placa alegórica al caudillo, indicando el nombre dado a ella, en su memoria.

PARAGRAFO.- Los costos que demande lo prescrito en este artículo serán sufragados por el H.C. CARLOS MORENO DE CARO, autor del presente Acuerdo.

ARTICULO 4°.- El presente Acuerdo rige a partir de la fecha de su publicación.

PUBLIQUESE, COMUNIQUESE Y CUMPLASE

Dado en Bogotá, a los días del mes de del año dos mil uno.

Presidente

CONCEJO DE BOGOTA

Secretario

CONCEJO DE BOGOTA

ANTANAS MOCKUS

Alcalde Mayor de Bogotá