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Proyecto de Acuerdo 156 de 2004 Concejo de Bogotá, D.C.

Fecha de Expedición:
15/07/2004
Fecha de Entrada en Vigencia:
15/07/2004
Medio de Publicación:
Anales del Concejo
La Secretaría Jurídica Distrital aclara que la información aquí contenida tiene exclusivamente carácter informativo, su vigencia está sujeta al análisis y competencias que determine la Ley o los reglamentos. Los contenidos están en permanente actualización.


 
 

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

PROYECTO DE ACUERDO 156 DE 2004.

"Por medio del cual se crea y desarrolla el carnaval de Bogotá y se dictan otras disposiciones"

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Introducción

El Distrito Capital posee una infraestructura cultural y artística de producción de bienes y servicios estratégica para las actividades culturales y de turismo, posee además la mejor red de Universidades y Escuelas de Arte, Museos, Teatros, Salas de Cine, Estadios, Media Torta, Parques, Restaurantes Típicos y de Comida Internacional y el Aeropuerto Internacional de mayor capacidad del País para conectarse con la ciudades mas importantes del mundo. Esto convierte a Bogotá en una ciudad competitiva a nivel mundial en materia de arte y cultura, ya sea desde el festival de teatro, las vacaciones recreativas, las exposiciones de pintura y escultura o desde la muestra artesanal de cientos de artistas que con gran maestría trabajan la orfebrería y joyería.

Sin duda Honorables Concejales, que las condiciones de la ciudad son muy especiales y favorables para la realización de un espectáculo cultural, pictórico, artístico y de relieve de nuestras tradiciones, con talla internacional al que habremos de llamar "EL CARNAVAL DE BOGOTÁ" una razón adicional para fortalecer la integración de las Localidades como uno de los principales atractivos para que nuestra juventud se integre y desarrolle la identidad cultural de su Localidad, que desde hace varios años está pugnando por salir a flote.

Este Proyecto de Acuerdo contribuye de manera eficiente a desarrollar el turismo y la cultura en la Capital, es de autoría de los Honorables Concejales:

1. ANTONIO GALÁN SARMIENTO

2.ARMANDO GUTIÉRREZ GONZÁLEZ

3.JORGE ERNESTO SALAMANCA

4. MARIA CLARA RAMÍREZ FERRO

5. LEO CESAR DIAGO CASASBUENAS

6. SEVERO ANTONIO CORREA VALENCIA

7. JORGE DURAN SILVA

 Un poco de Historia de los Carnavales.

Desde el comienzo de la vida social los hombres y las mujeres se entregaron a fiestas orgiásticas que celebraban los misterios de la vida y la muerte, las fuerzas de la naturaleza y el ciclo de las estaciones y las cosechas. Así, el carnaval tiene su origen en las fiestas paganas de la antigüedad.

Carnavalis o Carrus navalis es la más antigua etimología de la palabra carnaval. Un barco sobre ruedas o "carro naval" desfilando por las calles romanas. Esta carroza era conducida por el sacerdote del dios Baco (dios del vino), frente al coro disfrazado de sátiro que cantaba el Ditirambo en las bacanales, también llamadas dionisiacas.
Las celebraciones "carnavalescas" se remontan a más de 5.000 años, a las antiguas Sumeria y Egipto, a los cultos de Apis, buey sagrado, y de Isis, diosa egipcia de la fertilidad y la maternidad, y a las bacanales, saturnales y lupercales, y a otras fiestas griegas y romanas.

Estas tradiciones no llegaron a ser del todo destruidas por el cristianismo, a pesar de las feroces persecuciones de la iglesia contra las antiguas religiones. En vano, la iglesia, por lengua y pluma de sus pontífices, doctores y prelados, en púlpitos, cátedras y concilios, condenó las fiestas populares como contrarias al espíritu cristiano dictando bulas y decretos, pero estas manifestaciones lograron sobrevivir mezclándose con las tradiciones cristianas.

La imposición de la Cuaresma dio inicio a la tradición del carnaval. La palabra viene de la voz italiana carnavale y ésta, a su vez, del latín carnem levare que significa "quitar la carne". Carnes tollendas es otra palabra latina que significa "quitar las carnes", en plural, la cual aplica más exactamente puesto que no se refiere sólo a la carne del almuerzo. Así, los tres días antes de "quitar las carnes", hombres y mujeres se entregaban a todo tipo de excesos para llegar más que satisfechos redimidos a los cuarenta días consagrados por la iglesia para la castidad y la abstinencia.
Como expresión de la cultura europea, en especial de los países de tradición cristiana, el carnaval fue transmitido por España y Portugal a sus colonias americanas. Estas manifestaciones populares de origen netamente religioso se mezclaron en los pueblos del Caribe antillano con tradiciones y ritos africanos que formaban parte de la cultura de los esclavos negros traídos del África. Bogotá está asistiendo desde hace varios, por convocatoria de la teatrera doña Fanny Mikel a su celebración carnes tollendas, que por Semana Santa se celebra con gran éxito y participación internacional.

Rienda suelta a la expresión popular reprimida.

El bullicio del carnaval es un ejemplo de que las sociedades no son perfectas y que están permanentemente bajo la amenaza de su propia destrucción. Sin embargo, la inversión ritual propiciada por el carnaval resulta necesaria para mantener el orden social.

El carnaval pagano celebraba el Caos Primigenio, la Muerte y la Resurrección, rituales en los que se "personificaba" ese Caos mediante la completa alteración de todos los órdenes de convivencia: el social, el moral y el sexual.

La alteración del orden social se veía reflejada en la elección del "rey por un día", del "rey de los tontos" o del "rey de los locos"; la del orden moral en el trastocamiento de los principios del Bien y del Mal, remitiendo siempre a la idea del Caos Primigenio; y la del orden sexual en la liberación de todo el erotismo reprimido, exteriorizando la fuerza renovadora de la primavera, de la fertilidad y del origen de la vida. Hoy en día, el tiempo carnavalesco se vive como un lúdico juego de oposiciones, orden y desorden, se encuentran en un campo de batalla festivo. De un lado, el carnaval se enfrenta a las restricciones de la Cuaresma, es decir, de la religión, pues hay que observar continencia en el comer, en el beber y en la práctica sexual; por otro lado, el carnaval se opone a la vida cotidiana, regida por la ley y el orden. La desigualdad y la coacción son elementos del orden; la igualdad y la libertad forman parte de las manifestaciones del desorden. En el carnaval, la fiesta se vuelve subversiva, se conjura el mal, se entroniza la locura, se subvierte el orden establecido y el mundo se pone algo alborotado. Así, el carnaval resulta un ejercicio de soberanía popular, una crisis momentánea del mando donde el imaginario colectivo, temporalmente, asume el papel de estructurante social, con toda la responsabilidad del momento. En el carnaval, lo social no se aferra a la economía política racional, que asigna a los individuos unas funciones contractuales de acuerdo con la división del trabajo. En tiempo de carnaval, la multitud se entrega al desenfreno lúdico, se abre a las críticas y a los excesos; el disfraz y la máscara hacen de la inversión su juego preferido. La utilización de máscaras o disfraces y la posibilidad de preservar el anonimato facilita un mayor grado de libertad, de desahogo, de rechazo a los tabúes y a todo lo preestablecido. El carnaval se convierte de ese modo en una denuncia de los abusos de los poderes y de los propios vicios de la sociedad.

El disfraz y la máscara.

Los historiadores de todo el mundo están de acuerdo en que la fiesta de carnaval es muy anterior al cristianismo. Su origen es pagano, pero los pueblos cristianizados continuaron con muchos ritos, costumbres y fiestas del paganismo. El carnaval, de hecho, se celebra antes de la Cuaresma cristiana y permite a la gente romper sin pudor con cánones religiosos recurriendo a disfraces, máscaras y cantos incitantes. El disfraz y la máscara surgieron en todos los pueblos, como idea natural en el hombre, para encubrir su personalidad bajo otra apariencia, encarnando antepasados, espíritus, dioses, animales y toda clase de fuerzas sobrenaturales aterradoras y fecundantes. La costumbre del disfraz -con máscara o sin ella- tiene sus antecedentes en las farsas teatrales y en las ceremonias paganas: el culto de Apis en Egipto, de Aman en Judea, de Saturno en Roma, y en las fiestas a Pharmo de los hebreos (a pesar de que el Deuteronomio lo prohibía, estos celebraban enmascarándose y usando disfraces).

Máscara en latín significa "persona". En la antigüedad, se confería a la máscara el poder de la metamorfosis, era el vehículo de la transformación. La devoción del hombre por usarla puede encontrarse ya en el antiguo Egipto o en Grecia, e incluso en el teatro japonés. El antifaz, máscara simplificada, fue durante mucho tiempo atributo de la fiesta erótica y de la conspiración. En Italia, más precisamente en Venecia, la máscara y el antifaz se usaron no sólo como vehículo de alegría y diversión sino que sirvieron para guardar el incógnito y gozar de impunidad en venganzas y conspiraciones políticas, aunque también facilitaron romances y amoríos.

Con el paso del tiempo, estas costumbres quedaron relegadas a un orden puramente callejero. Empezó entonces a arraigar la tradición de entregarse a diversiones públicas sin un aparato festivo propiamente dicho. De la calle pasó el disfraz a los estrados de los nobles y los reyes, y fue natural consecuencia de este tránsito la invención de los bailes de máscaras que aparecieron simultáneamente en toda Europa. En España, durante el reinado de los Reyes Católicos, ya era costumbre disfrazarse en determinados días con el fin de gastar bromas en los lugares públicos. En 1523 Carlos I, dictó una ley prohibiendo las máscaras y los enmascarados. Felipe II también promulgó una prohibición. Fue Felipe IV quien restauró el esplendor y el uso de las máscaras. Afortunadamente en Barranquilla, el Rey Momo es el que manda durante las festividades.

Historia del Carnaval de Barranquilla.

Cuando mencionan el CARNAVAL de Barranquilla como fiesta que data de tiempos coloniales, los relatos y artículos lo señalan genéricamente como una celebración introducida por los españoles desde muy temprano. No obstante, cuando se analizan documentos sobre las fiestas de San Sebastián y La Candelaria que habrían dado lugar a perfiles del Carnaval de tradición étnica se observa, por un lado, que los rituales tienen procedencia africana; y por otro, que éstos son semejantes a los de Brasil y Uruguay. Rituales con las características de aquel descrito por Alcides d´Orbigny en 1827, al referirse a "las fantásticas ceremonias" que en Montevideo, el 6 de enero, celebraban todos los negros llegados de las costas de África, ejecutando danzas guerreras o representaciones coreográficas de trabajos agrícolas, las que años más tarde, ya elaboradas, se encontraron añadidas también al Carnaval de Montevideo.

Así, los actos de las fiestas de Cartagena a las que refiere Posada Gutiérrez deben catalogarse en un primer momento como rituales cristianos. En ellos se permitió participar a los esclavos urbanos, en derroche de paternalismo y para suavizar la sujeción. En esos días los negros congregados en cabildos, cada uno con su rey, su reina y sus príncipes y a la usanza de África, bajo paraguas desplegados, salían portando grandes escudos de madera forrados en papel de colores, vistiendo delantales de cuero de tigre y cantando y bailando con el séquito, en una danza de reminiscencias guerreras, al son de tambores y empuñando espadas y sables desenvainados.

Estas celebraciones de los negros, es obvio que nunca han sido características de las festividades que por muchos siglos se han venido celebrando como carnaval en Europa. Claro que, cuando EL CARNAVAL fue introducido con sus propios perfiles occidentales, esas celebraciones de negros en el litoral Atlántico, paulatinamente se fueron incorporando a las festividades de carnaval y sus participantes empezaron a integrarse a las masas indiscriminadas de celebrantes callejeros. Así aunque en Colombia, al igual que en otros lugares de América, las tradiciones de origen africano forman parte hoy del trance del Carnaval, no cabe asimilarlas a un rito de procedencia occidental. Ello seguiría propiciando el desconocimiento de la influencia cultural africana en aspectos de un país o de una región, como es el caso del carnaval en la ciudad de Barranquilla.

La aparición del carnaval en Barranquilla se correlaciona con su auge como puerto marítimo y ribereño y constituye el contexto por excelencia en el cual la ciudad, cuyas raíces históricas yacen en narraciones pastorales imprecisas, encuentra un símbolo vital de identidad en el panorama nacional.

En 1867, según crónica de Carlos J. Arosemena, se leyó el bando que determinó la iniciación oficial del carnaval. En el mismo año, el territorio que se conocía como Distrito de Barranquilla fue convertido en Provincia, y dentro de ella se señalaron como Distritos, la Ciudad con sus agregaciones, Galapa y sus congregaciones, Santo Tomás, Tubará y Soledad. Esta circunstancia es importante, ya que en el proceso de inmigración a Barranquilla como urbe en formación, los Distritos mencionados contribuyeron con su población y expresión cultural ancestral.

Años atrás.

En 1881 las fiestas del carnaval habían arraigado más entre quienes económicamente prosperaban con el tráfico y el comercio de Barranquilla - Sabanilla. La gente de menores ingresos quedó rezagada en los sitios donde había tenido asiento la Ciudad en sus albores. En tal sector se encuentra actualmente el barrio Rebolo, que es considerado como el más antiguo y que conserva aún numerosas tradiciones.

La vieja costumbre occidental de elegir en EL CARNAVAL a un hombre como personaje-símbolo de las fiestas se mantenía aun en 1881 en Barranquilla. En ese año se coronó a Enrique de la Rosa como Rey, quien a su vez designó heredero de solio, cetro y corona a otro varón: Ricardo Arjona. En 1892 el rey fue cambiando por un Presidente. Con este titulo un hombre continuó siendo el personaje-símbolo hasta 1918. En ese año se inició el reinado de mujeres que hasta la fecha se realiza.

Días de Carnaval.

EL CARNAVAL tiene 4 días de expresión intensa: empieza un sábado y termina la víspera del miércoles de ceniza. El bando que ordena la iniciación de las fiestas se leyó en los primeros tiempos en la Plaza de Armas, sobre la Calle de las Vacas; después en la Plaza de San Nicolás; más tarde en el Camellón Abello, el paseo Colón y en los últimos años en el Paseo Bolívar.

En 1943 ya existía la Junta Organizadora del Carnaval, elegida por la Asamblea Departamental e integrada por seis miembros.

En Rebolo se originaron las danzas del Toro Grande, El Garabato, los Pájaros, El Torito, La Danza de Barranquilla, Las ánimas de Rebolo y las cumbias Brisas de las Nieves y La Revoltosa.

En 1977 Alfredo de la Espriella, escritor y narrador de las tradiciones de Barranquilla, tanto de las clases sociales dominantes como de las populares, sugirió realizar un reinado en los barrios, con la idea de lograr una participación mas cabal de sus habitantes en las fiestas de la ciudad. Participarían 18 barrios, cada candidata capitanearía una danza y así se estimularían las tradiciones populares de Rebolo y otros barrios y finalmente se elegiría una Reina Popular.1

El mestizaje está presente en todas las manifestaciones populares del Carnaval de Barranquilla. Las culturas de los diferentes grupos humanos que llegaron a la Costa del Caribe Colombiano se mezclaron, y con el correr del tiempo se fueron creando nuevas expresiones que caracterizan nuestra identidad.

El Carnaval es la fiesta popular más importante de Barranquilla, la más alegre, la más libertaria, donde se refleja con más fuerza el espíritu jovial y creativo de nuestras gentes, y se afirma nuestra pertenencia al Caribe.

Es la fiesta de mayor goce, la de mayor dignidad, donde todos somos protagonistas. Cada Danza, cada cumbia, cada comparsa, cada disfraz concursa para hacer de esta fiesta el mejor espectáculo; no sólo para mostrarlo sino especialmente para gozarlo, porque así es el Caribe, donde, al igual que en las danzas africanas, el bailarín es el espectador y el espectador es el bailarín.

El Carnaval de Barranquilla tiene su origen remoto en el Carnaval que vino a América desde España. De ahí viene su espíritu de renovación y cambio parecido al que animó estas fiestas en Europa. Hoy encontramos en el Carnaval de Barranquilla hechos consagrados por la tradición, como las danzas, las cumbias, comedias, letanías y algunos disfraces, al igual que nuevas y originales creaciones de otras comparsas y disfraces que tienen igual validez que las consagradas por el tiempo, porque la tradición fundamental es la fiesta misma.

El primer Carnaval de Barranquilla se pierde en la historia, hace más de un siglo, cuando Barranquilla era una pequeña población.

Con el andar del tiempo el carnaval se ha ido desbordando por calles y plazas, recorriendo de sur a norte la ciudad hasta llegar a la Vía Cuarenta - la Avenida paralela al río Magdalena - y a la Calle 17 en el sur, que sirven todos los años el sábado y el domingo de Carnaval como escenarios del arte popular carnavalesco.

A medida que Barranquilla iba creciendo, el Carnaval también lo fue haciendo y el mismo fluir de las fiestas necesitó, para sobrevivir, de otras cosas más que de la sola espontaneidad. Por el gran número de participantes que congrega, hoy es indispensable organizarla, y necesita del concurso de todos para su éxito.

A las anteriores razones obedece la Cartilla, que se hace este año con el concurso de todos los grupos folklóricos y personas que son actores vitales de las festividades, a pesar de que la primera regla del Carnaval es que no tiene reglas. La intención es crear una guía para manejar su actuación en estas fiestas. Este documento recoge las conclusiones y recomendaciones establecidas en los talleres realizados con los directores de las diferentes manifestaciones culturales del Carnaval de Barranquilla.

Barranquilla es un centro urbano, a donde llegan muchas gentes provenientes de distintos lugares del Caribe Colombiano.

De esta manera, a su Carnaval, además de lo propio, se le han ido agregando danzas, músicas y comportamientos festivos de toda la zona.

El Carnaval de Barranquilla, al igual que los de otras partes del mundo, cuenta con expresiones propias de esas fiestas como producto de su origen; sin embargo, también es cierto que, al igual que ellos, lo hace de una manera particular y única, lo que también estuvo presente siempre en el diseño de estas orientaciones, respetando la relación entre el hoy y el ayer, pues lo uno está ligado a lo otro. 2

Exitosa presentación del Carnaval de Barranquilla en Europa.

La esencia, tradición y alegría de la Fiesta barranquillera fueron presentadas el pasado mes de abril en las principales Ciudades de Europa."Carnaval de Barranquilla para el mundo" fue el espectáculo carnavalero que presentó la Obra Maestra en la Sede General de La UNESCO en Paris, (Francia), en la Casa de la Cultura de Berlín, el la Plaza Mayor de Madrid y Sevilla (España).

La Cumbia, la Danza de Congo, la Danza del Garabato, Danzas de Negros y comparsas de Tradición popular como las Marimondas y Monocucos, manifestaciones culturales del Carnaval traspasaron fronteras y unidas en una sola expresión presentaron el carácter único y pluricultural de nuestra fiesta en el antiguo continente.

Cincuenta auténticos actores y hacedores del Carnaval integrantes de grupos folclóricos que desfilan por el Cumbiódromo de Barranquilla, viajaron en representación de todos los que también dan vida a cada una de las expresiones folclóricas que participan durante los cuatro días más alegres de Colombia.

El éxito acompañó a la delegación barranquillera durante toda la gira, inicialmente la Sala de la UNESCO con capacidad de 1462 personas estuvo totalmente colmada de espectadores que al final de la presentación subieron al escenario para continuar el Carnaval, en Berlín las localidades se agotaron una semana antes del espectáculo, la Plaza Mayor de Madrid registró la asistencia de unas 7000 personas y en Sevilla la Plaza de América estuvo tan concurrida que muchos se atrevieron a compararla con una plaza barranquillera.

El espíritu festivo del Carnaval engalanó las principales ciudades europeas hasta el punto que muchos de los barranquilleros salieron a las calles con atuendos típicos de nuestro país. Es importante resaltar que Europa pudo apreciar el colorido y la tradición de nuestro Carnaval, gracias al apoyo de la Alcaldía Distrital de Barranquilla, El Ministerio de Cultura, la Fundación Mario Santodomingo, la Cámara de Comercio de Barranquilla y la Sociedad Portuaria de Santa Marta.

Más de una razón para el Carnaval de Bogotá.

Honorables Concejales; Bogotá llamada Atenas Suramericana, nombre ganado por su alta cultura y sobresaliente expresión de las artes y las letras es la Ciudad más importante de Colombia y en Latinoamérica y el mundo se destaca como ciudad universal, que de tiempo atrás cultiva como su mayor tesoro la educación de sus jóvenes con énfasis en artes y humanidades en la esperanza de conservar una generación llena de glorias para la literatura, la ciencia y la tecnología. Bogotá no debe mantener cerrada su puerta al Carnaval y alegría de su gente, que siendo de todas las latitudes aporta riqueza espiritual y un ritual sagrado de lo real maravilloso de las tres culturas primigenias a nuestro acervo cultural. Queremos el carnaval para volver a nuestras raíces, Caribe, Chibcha y Arwac. Viva el carnaval.

Atentamente;

JORGE DURAN SILVA

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

SEVERO ANTONIO CORREA VALENCIA

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

NOTAS DE PIE DE PÁGINA:

1Tomado del libro Carnaval de Barranquilla Autora Nina S. de Friedemann .Publicación de El Heraldo

2 Información tomada de la publicación hecha por la fundación carnaval Internacional de Barranquilla, entidad a la que expresamos nuestra especial felicitación.

ANTONIO GALÁN SARMIENTO

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

ARMANDO GUTIÉRREZ GONZÁLEZ

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

JORGE ERNESTO SALAMANCA

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

MARIA CLARA RAMÍREZ FERRO

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

LEO CESAR DIAGO CASASBUENAS

CONCEJAL DE BOGOTÁ D.C.

PROYECTO DE ACUERDO ___ DE 2004

"Por el cual se crea y desarrolla el "CARNAVAL INTERNACIONAL DE BOGOTÁ" y se dictan otras disposiciones"

EL CONCEJO DE BOGOTÁ, D.C., en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, en especial de las previstas en el Decreto 1421 de 1993,

ACUERDA

ARTÍCULO 1. CREACIÓN DEL CARNAVAL INTERNACIONAL DE BOGOTÁ D.C. Para que procure el rescate, preservación y divulgación de las expresiones propias de las culturas Caribe, Chibcha y Arwac, se ordena por el Concejo de Bogotá D.C, la creación del CARNAVAL INTERNACIONAL DE BOGOTÁ D.C.

ARTÍCULO 2. REALIZACIÓN DEL CARNAVAL INTERNACIONAL DE BOGOTÁ D.C. El Carnaval Internacional de Bogotá D.C se realizará anualmente durante la segunda semana del mes de diciembre coincidiendo la clausura con la festividad decembrina de las velitas.

ARTÍCULO 3. ORGANIZACIÓN DEL CARNAVAL INTERNACIONAL DE BOGOTÁ D.C., la organización del Carnaval Internacional de Bogotá estará a cargo del Instituto Distrital de Cultura y Turismo, quien para cumplir su cometido designará para cada evento un Director del Carnaval, quien tendrá en cuenta las manifestaciones culturales de las Localidades expresadas mediante los Festivales al Parque, la Ciclovía, el Festival Iberoamericano de Teatro, el Desfile Metropolitano de Comparsas y el Festival de Verano, interpretando y armonizando el querer de los actores y hacedores del carnaval y buscando el bienestar de los ciudadanos participantes.

ARTÍCULO 4. LAS ORGANIZACIONES DEL CARNAVAL. Se tendrán como organizaciones del carnaval en calidad de hacedores a las Escuelas de Artes escénicas que funcionen legalmente en el Distrito Capital, las organizaciones de actores, músicos, danzas y grupos de teatro que funcionen en las Localidades.

PARÁGRAFO. Los hacedores del carnaval serán reconocidos como el recurso más valioso y la fuerza impulsora del Carnaval. El Instituto Distrital de Cultura y Turismo reconocerá mediante distinción especial que otorgará anualmente, el desempeño de los hacedores del carnaval.

ARTÍCULO 4. VALORES A DESTACAR EN EL CARNAVAL. Los hacedores del carnaval destacarán a través de su participación los siguientes valores propios de nuestra sociedad y de las culturas primigenias:

  • TRADICIÓN. Las tradiciones serán respetadas en y con las diferentes formas de expresión que se utilicen por los hacedores y participantes durante el Carnaval
  • DISFRUTE. El disfrute de las fiestas del Carnaval mostrarán al País y al Mundo la identidad cultural de las Localidades de Bogotá D.C. impulsando el respeto por la diversidad
  • MANIFESTACIONES CULTURALES POPULARES. Los hacedores son garantes de la defensa y promoción de las manifestaciones culturales populares locales haciendo posible su identificación mediante la presentación de Danzas folclóricas regionales, comparsas, teatro callejero, disfraces, copleros, alegrías etc.
  • INVESTIGACIÓN SOCIOPOLÍTICA Y CULTURAL. El Instituto Distrital de Cultura y Turismo publicará con un mes de anticipación a la realización del carnaval los estudios sociológicos, antropológicos, culturales, políticos y sociales que sean escogidos en concurso abierto y que representen las tradiciones culturales locales. Los trabajos escogidos tendrán como premio mención honorífica y la publicación misma.
  • ESCOGENCIA DEL AFICHE DEL CARNAVAL. Para cada realización se hará una convocatoria abierta a los artistas plásticos de la Ciudad para que propongan el afiche institucional del carnaval. El premio será la mención honorífica y la publicación del afiche
  • TEMA ANUAL DEL CARNAVAL. El tema anual del carnaval será seleccionado por los hacedores locales y propuesto a la Dirección del Carnaval. Las propuestas estarán relacionadas con personas de la Localidad que se destaquen o lo hayan hecho, por su trabajo en pro de la respectiva Localidad. La dirección del carnaval denominará con los nombres propuestos por cada localidad los diferentes actos representativos.

ARTÍCULO 5. VIGENCIA. El presente acuerdo rige a partir de la fecha de su sanción.

FIRMADO