RÉGIMEN LEGAL DE BOGOTÁ D.C.

Según el articulo 37 de la Constitución Nacional "toda parte del pueblo puede reunirse y manifestarse publica y pacíficamente". En lugar de proteger este derecho constitucional, el Estado cada vez más lo limita, no autorizando las manifestaciones públicas y las concentraciones.

El país y la ciudad requieren de la ampliación de las libertades, políticas y sindicales, de la participación del pueblo en las decisiones que le afecten y en la construcción de un futuro con justicia social y democracia real. El ejercicio real al derecho consagrado en el artículo 37 de la Carta Magna requiere de condiciones propicias y de una actitud consecuente del Estado. Contribuir a la identificación de espacios públicos que posibiliten el normal desarrollo de las manifestaciones públicas es un aporte importante para garantizar el ejercicio efectivo de las libertades públicas. El proyecto de acuerdo que presento a consideración del Concejo se inscribe en esta perspectiva.

La Plazoleta de Ecopetrol históricamente ha sido espacio de concentración de miles de trabajadores y población en general para expresar sus protestas, denuncias, exigencias, brindar solidaridad, para desarrollar diversas expresiones artísticas y culturales, etc., actividades que se desarrollan en forma organizada y pacífica. Se ha convertido por lo tanto en un símbolo y referente por la defensa de las libertades políticas, sindicales, de los derechos humanos y de las luchas populares por la justicia social y por las cambios que requiere la sociedad colombiana. Ha sido punto de encuentro de trabajadores de diversas latitudes del país.

La ciudad de Bogotá, necesita afianzar no solo los espacios de recreación sino también aquellos espacios que contribuyan al ejercicio de la democracia, para que los ciudadanos puedan expresarse libremente, -con las garantías y la protección del Estado-, frente a los diversos problemas que aquejan al país. En el Plan de Desarrollo de Mockus se señala que hay que propiciar la cultura democrática; la comunicación y la solidaridad entre las personas mediante el uso de los espacios públicos. Igualmente el POT destaca en diversos artículos la necesidad de creación de plazas cívicas. La cultura democrática, la comunicación y solidaridad deben tener espacios físicos públicos que posibiliten su ejercicio. Con el proyecto de acuerdo no se está creando una nueva plaza sino asignándole un nombre a una plazoleta que ya existe, lo que contribuirá necesariamente a elevar esa cultura democrática entendida como la practica de acciones y actividades con plena libertad de expresión y opinión, que permitan en forma real la expresión de la inconformidad del pueblo frente a las injusticias, al desconocimiento de los derechos humanos y en general contra todo acto de gobierno que vulnere los intereses de la población

Pero el reconocimiento a la lucha de los trabajadores, no se puede circunscribir solamente a la identificación de una plaza. Creo que hay que personificarlo en uno de los cientos de trabajadores que han luchado por la democracia y la libertad en nuestro país. Habría cientos de nombres de luchadores que se han destacado a través de toda historia de las luchas populares en Colombia. El homenaje va para todos ellos, pero queremos resaltar a un hombre, a un obrero que se ganó la simpatía y el respeto de sus compañeros de trabajo y de lucha y que hoy es recordado con cariño, como ejemplo de responsabilidad y de entrega a las causas populares. Se trata del líder sindical y poeta obrero MANUEL GUSTAVO CHACON SARMIENTO de la Unión sindical Obrera.

Manuel Gustavo Chacón, nació el 24 de mayo de 1953 en Charalá Santander, cuna de valientes y tierra de comuneros. Siendo muy niño llega a Piedecuesta donde empieza a germinar la semilla de la inquietud de la lucha por la vida y la libertad. Como intrépido boy scout recorrió y durmió con sus tropas de lobatos en las profundas cuevas de la Mesa de los Santos y parques naturales de la región. Como flautista entonaba melodías y como aventurero con morral al hombro recorrió en auto-stop los caminos de Colombia y aprendió a conocer sus gentes y sus angustias. Como deportista consumado conoció a María Elisa, quien fuera su esposa y madre de sus tres hijos.

Como poeta cantor encuentra en el auditorio de su colegio Balbino García la plataforma ideal para plantar desde allí su testamento rebelde expresando con su lírica las vibraciones de nuestra patria, de instantes tristes por los infortunios nacionales, pero también versos de amor, esperanza y fraternidad.

El "loco chacón" como cariñosamente le decían sus compañeros, llega a la ciudad el oro negro, Barrancaberneja, a principios del 1977, con su morral cargado de sueños e ilusiones, sus poemas y su flauta. Ingresa al SENA donde estudia metalistería y de allí pasa a los talleres de mantenimiento de ECOPETROL, donde se consagra como excelente trabajador.

Su espíritu inquieto y aguerrido hace que muy pronto se incorpore a las filas de la USO, donde a través del canto hace rápidamente empatía con la clase obrera a quien le ofrece sus acentos populares de inconformidad ante la injusticia. Su voz trasciende las fronteras del sindicalismo y se mezcla con el clamor popular.

Empuñando su flauta y sus canciones y con las banderas de la Uso levantada, se lanza a abrir conciencias en el pueblo aletargado. Y eso es, lo que no se perdona a un militante de la vida, a un solado de la alegría y la risa. Y cuando se cerraba la primer quincena del primer mes del 88, cae acribillado por sicarios quienes le dispararon por la espalda, en un calle cualquiera de esa ciudad que el despertó tantas veces en busca de justicia.

Hoy 13 años después de su muerte, el pensamiento de este poeta obrero sigue vivo.

Como el mismo lo dijera en forma premonitoria en la dedicatoria manuscrita a un amigo:

"Alberto: nosotros, los que dedicamos parte de nuestra existencia a la lucha popular, vemos en nuestros escritos el logro fabuloso de plasmar nuestro pensamiento para dejar la huella de nuestro paso por el sendero de la revolución. Tu amigo Manuel"

Teniendo en cuenta todo lo anterior, se propone denominar la actual plazoleta de Ecopetrol como PLAZA DE LA LIBERTAD MANUEL GUSTAVO CHACON SARMIENTO, cual está ubicada entre las calles 36 y 37 y entre las carreras 8 y 13.

Espero contar con el apoyo de los concejales para sacar adelante esta iniciativa que será de gran provecho para la ciudad, los trabajadores y la ciudadanía en general.

Presentada por el Concejal MARIO UPEGUI HURTADO

ARTICULO 1º. Designase con el nombre PLAZA DE LA LIBERTAD MANUEL GUSTAVO CHACON SARMIENTO la actual Plazoleta de ECOPETROL, ubicada entre las calles 36 y 37 y entre las carreras 8 y 13, de la nomenclatura del Distrito capital.

ARTICULO 2º. La Administración Distrital instalará una placa alusiva al nombre de LA PLAZA DE LA LIBERTAD MANUEL GUSTAVO CHACON SARMIENTO en un lugar visible y hará la señalización correspondiente.

ARTICULO 3º. El presente acuerdo, en pergamino, será entregado por el Presidente del Concejo de Bogotá a la Junta Directiva de la Unión Sindical Obrera- USO.

ARTICULO 4º. El presente acuerdo rige a partir de la fecha de su publicación.